Para pasar unas vacaciones en donde la paz y el movimiento se junten para unas vacaciones inolvidables, los balnearios de Rocha son ideales. Allí se encuentra de todo; la pesca junto con el surf, hay paz y también movimiento, soledad pero también hay gente y mucha, pero mucha playa.
A través de 180 kilómetros de costa atlántica, diversos balnearios se distribuyen ofreciendo espaciosas casas de alquiler, muy buenos hoteles, campings arbolados y diversas posibilidades de diversión.

Aguas Dulces: Un pintoresco lugar caracterizado por ranchos y cabañas que se ubican frente al mar. Típico pueblo costero del interior que ha logrado mantenerse intacto a través de los años y de las visitas turísticas.

Barra del Chuy: Mezcla de pueblo y balneario tradicional en el último tramo de costa uruguaya, estirado sobre una playa oceánica abierta, cuenta con dos campings y un servicio regular de ómnibus que cubre los 9 km. que la separan del Chuy.

Cabo Polonio: Si el mundo está cada vez más polucionado y superpoblado, Rocha brinda la posibilidad de escapar de esos flagelos. Su herramienta para lograr ese objetivo son pequeños pueblos que han surgido junto al impresionante Océano. Uno de estos pueblos rústicos, como los llama el Ministerio de Turismo, es el Cabo Polonio.

Castillos: Castillos, la capital del medio ambiente, ofrece vivir unas vacaciones de descanso, playas y paisajes. La población fue fundada en 1866 por Hermógenes Formoso, en una zona ganadera y agrícola donde abunda la palma butiá, que en otoño ofrece su apetecido fruto ácido.

La Coronilla: Cerca de la Barra del Chuy, al norte de Santa Teresa, se erige una pequeña ciudad que ofrece al visitante de Rocha una renovada oferta veraniega. Fue el primer balneario en hacerse conocer.

La Paloma: Noventa kilómetros al este de Punta del Este, en el Cabo Santa María, dominando las pintorescas costas de Rocha, el visitante puede encontrar aquello que soñó y mucho más. Nos referimos al balneario puerto de La Paloma. Una quincena de playas desde la Laguna de Rocha hasta el Balneario La Pedrera, le permitirá encontrar un lugar ideal para veranear.

La Pedrera: Si de comer peces y mariscos se trata, también el Balneario La Pedrera es muy conocido. El conjunto de casas, que datan de 1898, se asoman al mar en un auténtico balcón. La Pedrera es vista desde lejos como un premonitorio del mar, único en el país.

Punta del Diablo: Es un verdadero pueblo de pescadores cuyos habitantes permanecieron durante años aislados y abocados a la pesca de tiburón. En las últimas décadas muchos visitantes descubrieron la gran personalidad de este pueblito situado sobre una punta rocosa cuyas masas pétreas adoptan insólitas formas.

Valizas: Tiene un aire de un pueblo de pescadores y de un pedazo de campo simultáneamente frente al mar, con construcciones de madera y quincho crean en la zona una arquitectura peculiar que aprovecha las materias primas de la zona.

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